Exclusiva promo por tan solo $4,99 disfruta 1 mes de videos sin publicidad y zona vip gratis, haz click aquiUnete a nuestro nuevo grupo de telegram para enterarte del contenido nuevo subido a diario
Inicio Subir relato
16 Feb 2024Tu dormido y yo cogiendo con tu amigo Hola mi nombre es Marce, 45 anos y casada hace 10 anos con Mario 48 anos vivimos en CDMX.

Somos una pareja considero que tipica yo de estatura promedio cabello castano claro lacio hasta los hombros delgada senos de buen tamano pero lo mejor son mis piernas y unas nalgas de infarto que hacen que los hombres me volteen a ver por la calle. El es de estatura promedio sobrepeso rubio de ojos verdes su verga es de tamano normal. Nos conocimos en la preparatoria me enamoro su seguridad y buen cuerpo ya que hacia mucho ejercicio que con la cerveza se le han ido a la barriga. Es muy extrovertido y yo soy mas timida me case de 25 anos y virgen por lo que toda mi experiencia era con el. Una vez me dijo si me gustaria probar otra verga e imaginabamos que yo tenia sexo con otros sentia que eso lo excitaba y me lo hacia mejor. Por motivos de trabajo tuvo que salir fuera de la ciudad, a su regreso planeamos un fin de semana romantico antes de que llegara me llamo:

Hola preciosa que crees? invite a Adrian a la casa para tomar unos tragos y platicar no te molesta verdad?

Yo: pero… es nuestro fin romantico ademas prepare un outfit que te encantara otro dia lo invitas.

Pero tenemos 2 dias para eso solo es hoy por la noche y manana te recompenso va? de todos modos puedes arreglarte sexy no creo a Adrian le incomode darse un taco de ojo.

Haz lo que quieras ahi te dejo las cosas yo me subo a dormir le colgue el telefono muy enfadada por el cambio de planes.

Oi que llegaron pusieron musica y despues de un rato subio a la recamara a saludarme.

Hola preciosa me extranaste?

Sin despegar los ojos de la television segui viendo mi pelicula.

No seas asi anda baja a tomar unos tragos con nosotros y se te pasa el mal genio.

Dejame tranquila y diviertete con tu amigote le di la espalda y el salio de la habitacion.

Paso el tiempo y pense va la mia saque un vestidito blanco corto cenido de arriba pero amplio de abajo que me hace ver mas nalgona unos tacones, bra de media copa y una tanguita blanca muy sexy con solo un triangulo por detras con toda la intencion de gustarle a Adrian y pense “Esto quieres pues ahora que disfrute este cabron”.

Baje las escaleras Adrian estaba de frente por lo que me vio y me comio con los ojos mi esposo volteo puso cara de sorpresa y dijo “No tienes frio te traigo un sweater” Adrian contesto “Cual frio no seas celoso estamos entre amigos” rapidamente me acerque a saludar de beso a Adrian ignorando a mi marido pero me agache para que tuviera una buena vista de mi escote note que clavo su mirada en mis pechos y me sirvio un whiskey.

A: Con todo respeto pero brindemos por lo suertudo que eres de estar casado con esta belleza.

Yo solo esboce una sonrisa me sente en la silla que estaba entre ambos cruce la pierna para que Adrian las viera mejor y mi marido se molestara mas mi plan estaba saliendo como queria si el me amargo mi noche yo le echaria a perder la suya.

Seguimos tomando platicando de cualquier tema pero yo notaba a mi marido bastante tomado se paro a arreglar algo de la musica yo segui platicando con Adrian pero note que se tardaba y lo vi en la sala dormido.

A: Uhh no aguanto y eso que soy el viejo jaja

Espera que voy a despertarlo, no te puedes ir que tienes que ayudarme a subirlo.

A: Mejor tomate otra conmigo.

Me asusto la mirada de Adrian pero me enoje mas con mi esposo por dejarme sola, no quise demostrarle miedo me sentia un poco mareada pero decidi continuar.

Me sirvio otro trago y dijo uff Marce si supieras como me pones” alcance a levantarme a la cocina para servir mas botana y pensar como decirle que se fuera, le conteste “segun tu como te pongo?”

Al regresar mi sorpresa fue verlo con su miembro fuera, era la primera vez que veia uno distinto al de mi esposo, era mas grande super dura, me quede pasmada viendo como Adrian se la estaba jalando frente a mi “Marce estas buenisima”

Cambio de mano sin dejar de jalarsela y puso su mano en mis piernas ¿Que haces? le dije pero no me movi estiro la mano para tocar mis muslos voltee a ver a mi marido y seguia perdido puso su mano en mi vagina, tocaba mi clitoris, estaba sintiendo tan rico hizo hacia la tanguita de lado para introducirse en mi raja.

No espera eso no mmm alcance a soltar un leve gemido Esta mal detente..

La otra mano tocaba mi culo “Que rico culo te cargas” mis piernas senti que se abrian no me controlaba y estaba mojadisima.

Rapidamente se hinco para darme un beso chupaba mi clitoris con habilidad tomaba mis nalgas y las apretaba sentia su lengua dentro de mi devorandome con mis manos presionaba su cabeza contra mi sexo.

Con el vestido a la cintura y el detras de mi senti que ponia esa verga dura entre mis nalgas se sentia caliente y durisima sus manos recorrian mis senos pero habia llegado demasiado lejos e intente que parara.

Basta Adrian ya es hora que te vayas.

A: Dejame al menos terminar entre tus nalgas no me dejes ir asi mientras deslizaba su mano otra vez a mi raja.

Pero no vas a entrar vente y ya Ok?

A: Si chiquita solo eso

La escena me daba mucho morbo despues de tanto fantasear se le estaba cumpliendo y el muy cabron se lo perdia. Baje mi mano y toque el miembro de Adrian me incline para tocar sus huevos estaban que explotaban los acariciaba hizo a un lado mi tanguita pense que meteria sus dedos senti como de golpe me metia su verga.

Sacala te dije que esto no ahhh no, para por favor nos va a escuchar.

A: Sabes que la quieres Marce en serio que la saque?

Dejo de moverse y era yo la que mas se movia me incline en la mesa “Cogeme cabron demuestrame que me traes ganas”

A: Asi muevete que rica y apretadita estas te voy a llenar de leche mientras me daba unas nalgadas.

Damelo metelo todo quiero toda tu leche nunca habia tenido una verga como la tuya sigue y no pares que rico.

Sus huevos chocaban con mis nalgas yo me aguantaba queria gritar de placer pero no queria que mi marido despertara y arruinara el momento lo sente en la silla retire mi tanguita y me sente sobre el comence a moverme arriba/ abajo queria exprimirlo el se comia mis pezones y con las manos apretaba mis nalgas en esa posicion podia sentir todo su miembro dentro de mi mi cara era puro placer lo sentia mordia mis labios y en cada movimiento aumentaba la intensidad.

“Que rica verga Adrian metemela toda por favor”

Yo entrecortaba mis gemidos disimulados por la musica que seguia sonando en cada estocada mis senos rebotaban sin control mi cabello lo tenia sobre mi cara y el con una mano controlaba mis manos y con la otra apretaba mis nalgas marcando sus dedos

Le dije al oido “Que rico me coges Adrian, me vengo cogeme fuerte llename toda” arque mi espalda todo lo que pude recargando mis manos en la mesa el me bombeo mas duro , un chorro caliente me llenaba toda en mi interior.

Dijo “A sido el mejor palo de mi vida” le conteste “el mio tambien”.

Arregle mi tanguita bra y vestido mientras el hacia lo mismo me dijo si me ayuda a subir a mi marido le dije que lo dejara dormir en el sofa que esta noche

Decidi no banarme para quedarme con esa aroma a sexo mi tanguita acabo totalmente mojada y con residuos de Adrian me puse la pijama y me dormi.

El sigue trabajando con mi esposo no lo veo desde hace 2 semanas y prefiero siga asi pero una no sabe..
08 Feb 2024¿Que hace el abuelo con mis primas? La madre de Denisse la obliga a camelarse a su abuelo para que la incluya en el testamento, pero tendra en sus primas dos duras competidoras.

Es sabido que hay personas capaces de hacer cualquier cosa por dinero, de eso no me cabia ninguna duda, lo que descubri fue que algunos incluso usan a sus hijos para conseguirlo. En mi caso, fueron mis padres los que me utilizaron a mi, creyendo que iban a sacar beneficio. Lo que no imaginaban era en lo que eso me iba a convertir a mi.

Mi vida era la de una muchacha normal de mi edad. Por suerte, no tenia mas preocupaciones que los estudios y en eso concentraba todos mis esfuerzos. Tenia unas buenas amigas, aunque quizas demasiado obsesionadas con los chicos, pero yo tenia claro que a esa edad lo prioritario eran los estudios y sacar las mejores notas posibles.

Eso no queria decir que no me gustara divertirme siempre que la agenda escolar me lo permitiera. Tenia amigas a las que sus padres no las dejaban salir nunca y otras a las que no les ponian ningun tipo de control. Yo estaba en un punto medio, me dejaban hacer planes fuera del instituto, pero siempre tenia que estar disponible para sus paranoias.

Porque mis padres eran unos tipos muy peculiares. Aunque aparentemente fuesen normales, yo sabia que en realidad se trataba de dos personas mas preocupadas por criticar a los demas que por ellos mismos. Solo consideraban que estaba bien lo que ellos hacian, cuando, en realidad, su forma de ser era la mas reprochable de todas.

Mi padre llevaba casi toda la vida viviendo de una pension del estado por una dolencia leve de espalda que el exageraba para no tener que trabajar. Era un vago con todas las letras al que solo le salvaba la simpatia que solia fingir de cara al publico. Conmigo era bueno, eso no podia negarlo, pero ya tenia una edad en la que me avergonzaba por sus comportamientos.

Y luego estaba mi madre, una persona aun mas particular. Ella venia de una buena familia, de vivir de manera acomodada, hasta que sus padres decidieron que ya se habia terminado lo de vivir del cuento. No le cerraron el grifo por completo porque sabian que no iba a ser capaz de ganarse la vida por ella misma, pero la asignacion mensual que le seguian dando de adulta no era gran cosa.

Quizas lo que mas me afectaba de ellos era el hecho de no haberlos visto trabajar nunca. Se hacia complicado creerles cuando me decian que tenia que estudiar para poder ganarme la vida en el futuro. Eran un mal ejemplo para mi, ademas de tenerme siempre en tension porque nunca sabia con que ocurrencia o chisme podian venirme.

- Tengo una buena noticia, Denisse.

- ¿De que se trata esta vez, mama?

- El abuelo se esta muriendo.

- Has dicho que era buena.

- Ya, ya lo se.

- ¿Como va a ser buena noticia que tu padre se muera?

- Porque nos va a dejar un dineral.

- ¿Solo te importa eso?

- No tendremos que trabajar nunca mas.

- Pero si papa y tu no habeis trabajado en la vida.

- Pues si te portas bien, tu tampoco tendras que hacerlo.

Aunque mi madre nunca habia ocultado sus ansias de heredar, no esperaba que llegasen hasta tal punto de desear que su padre muriera. Desde que mi abuelo quedo viudo supo que mas pronto que tarde el tambien se iria y su enorme fortuna se repartiria entre ella y su hermana mayor, con la que tenia una rivalidad bastante peculiar.

Sabia que yo tambien me beneficiaria del deceso de mi abuelo, que, poco o mucho, algo tambien heredaria, pero preferia vivir con la tranquilidad de no haberle deseado el mal a nadie, y menos a un familiar. Aunque no hubiese aprendido nada sobre constancia y esfuerzo de mis padres, tenia claro que en el futuro no queria algo que no me hubiese ganado con mi trabajo.

Eso no queria decir que si el abuelo, por propia voluntad, decidiera dejarme algo lo fuese a rechazar. Tambien me asustaba lo que dos descerebrados como mis padres pudieran hacer con tanto dinero, por eso preferia tener mis propios recursos para poder alejarme de ellos. El problema era que mi madre sabia como conseguir manipularme.

Muchas fueron las veces que trate de convencerla para algo, y al final era siempre ella la que me obligaba a cambiar de opinion a mi. Con mi madre ya nada me pillaba por sorpresa, o al menos eso era lo que creia, hasta que me conto lo que habia planeado junto a su hermana para dar el paso definitivo que le asegurara la herencia.

- ¿Que te pareceria pasar el verano en una casita en la playa?

- Raro, porque nunca me habeis llevado mas lejos de la piscina municipal.

- Serian unas vacaciones en familia.

- ¿Nosotros tres?

- Y tambien con el abuelo, la tia y tus primas.

- Pero si la tia y tu no os soportais.

- Digamos que las dos tenemos una preocupacion en comun.

- No me lo digas... !la herencia!

- Asegurar lo que es nuestro, si.

- Creia que os ibais a sacar los ojos por cada centimo.

- Yo tambien lo pensaba, pero nos tenemos que aliar contra un enemigo comun.

- ¿De que hablas?

- No nos fiamos de la cuidadora de nuestro padre.

- Pobre mujer, si se esta tragando los peores anos del abuelo.

- Por eso mismo, el siempre ha sido muy blando y es capaz de dejarle algo.

- Bien merecido se lo tendria.

- El dinero y la casa nos pertenece a sus hijas.

- No tengo ninguna gana de soportar a las primas.

- Te entiendo, querida, pero esto no se nos puede escapar.

Siempre habia reganado a mi madre por la mala relacion que tenia con su hermana, le decia que con la familia habia que llevarse bien, pero la realidad era que yo no soportaba a mis primas. Mientras que yo vivia avergonzada porque mis padres me mantenian practicamente de la caridad, ellas eran unas pijas que presumian de todo lo que su padre les compraba.

Por motivos que aun no alcanzaba a entender, mi madre se habia conformado al casarse con un vago, pero mi tia aspiraba a mas y acabo cazando a un rico empresario portugues. La relacion no duro demasiado, aunque si que le dio tiempo a quedarse embarazada de gemelas y asegurarse el futuro economico gracias a sus hijas.

Puede que mi tia se esforzara por disimular el desprecio que sentia hacia nosotros, pero, Catia y Gilma, mis primas, nunca perdian la oportunidad para mirarnos por encima del hombro. Solo el dinero de la herencia podia conseguir que dos familias con una relacion tan mala decidieran aparcar sus diferencias y juntarse durante un verano entero.

Durante las pocas semanas que quedaban hasta las vacaciones intente por todos los medios que mi madre me permitiera no acudir con ellos a la casa de la playa. No solo no queria verme envuelta en lo que fuese que tuvieran preparado para convencer al abuelo, tampoco queria compartir un solo segundo con mis odiosas primas.

Pero nada de lo que probe dio resultado. Mi madre era consciente de que yo tenia mas posibilidades de convencer al abuelo que ella misma, asi que no podia faltar. Una vez mas, cedi a sus pretensiones y me prepare para lo que daba por hecho que seria el peor verano de mi vida. Al menos tendria cerca la playa, que era algo que no podia decir demasiado a menudo.

- ¿Que pretendes que haga para convencerlo?

- Ser simpatica y carinosa con el.

- Es mi abuelo, se supone que siempre debo comportarme asi.

- Muy bien, Denisse, esa es la actitud.

- ¿Como te lo vas a ganar tu? Porque no es que te tenga mucha simpatia.

- Digo yo que a un paso de la muerte querra estar a bien con su hija pequena.

- O quizas sea el momento ideal para mandaros a tomar por saco a las dos por malas hijas.

Lo que estaba claro era que nos ibamos a reunir unos personajes muy variopintos y podia pasar de todo. Cuando llego el dia de partir hacia la playa llene mi maleta de bikinis y poco mas, esperando que durante esas vacaciones no se me exigiera mas que disfrutar del mar. Mi intencion era afrontarlo con serenidad, no preocuparme de lo que hicieran mis primas y tampoco agobiar demasiado al abuelo.

La casa que habian alquilado era espectacular, se notaba quien corria con todos los gastos. Si era un poco inteligente, apenas tendria que cruzarme con nadie de la familia, simplemente estar encerrada en la enorme habitacion que me habian asignado y de ahi a la playa. Decirlo era muy sencillo, pero en cuanto vi a Catia y Gilma ya tenia ganas de pelearme con ellas.

Era algo superior a mi. Veia a mis primas, con esos aires de superioridad y esa prepotencia, cuando las tres veniamos de la misma familia, y me daban ganas de tirarles de los pelos. Yo siempre habia sido pacifica, pero ellas sacaban lo peor que tenia dentro, probablemente por la negativa influencia que mi madre siempre habia ejercido.

- Hola, prima Denisse.

- Catia, guapa, ¿como estas?

- Pues aqui... como todos.

- Vaya ocurrencia han tenido nuestras madres, ¿no?

- Hay que estar con el abuelito en sus ultimos dias.

- Pero quizas no era necesario hacerlo a cientos de kilometros de casa.

- Aqui estara mas tranquilo, relajado... y receptivo.

- ¿Receptivo?

- Para ver si podemos llevarnos un pellizco en el testamento.

- ¿Tu tambien has venido para eso?

- Claro, Gilma ya esta con el ahora mismo.

- Me parece lamentable.

- Se va a morir igual, mejor que nos deje el dinero a nosotras.

- ¿Y tu madre que opina de eso?

- No lo sabe, piensa que solo tiene que competir con la tuya por la herencia.

Podia llegar a soportar que mi madre y mi tia se comportaran como dos hienas carroneras en busca de la herencia, pero me ardia la sangre al pensar que pudieran ser mis primas las que se la repartieran. En ese momento senti el impulso de entrar yo tambien en juego, mas que por lo que yo pudiera ganar, por lo que pudiese hacerles perder a ellas.

Pero tenia que ser realista. Aunque mi relacion con el abuelo fuese buena, no se podia comparar con la que mis primas tenian con el. Ellas siempre fueron mas cercanas, aunque fuese unicamente para hacerle la pelota. Cualquier aproximacion que hiciera quedaria en nada si la comparamos con lo que Catia y Gilma estaban dispuestas a hacer.

Justo asi transcurrieron los primeros dias. Mientras mi madre y mi tia se lanzaban constantemente indirectas y llegaban casi a la discusion, mis primas no necesitaban nada de eso para empezar a camelarse al abuelo. Siempre estaban alrededor de el abrazandole, besandole y riendole todas las gracias. Cada vez que queria acercarme siempre tenia que toparme con ellas.

Lo que mas me fastidiaba de todo era que empezaba a sentir la frustracion que mi madre siempre habia llevado en su interior, y lo ultimo que queria era ser como ella. Alli el unico que parecia disfrutar de la playa era mi padre, todo el dia sin dar un palo al agua y ajeno a la disputa. Mi abuelo nunca lo habia soportado, asi que no tenia nada que rascar en el tema de la herencia.

La guerra familiar finalmente estallo a los diez dias de estar alli. Mi madre no soporto las exageradas y falsas muestras de carino de mi tia hacia su padre y acabaron discutiendo de manera exagerada, hasta tal punto que casi llegan a las manos. Puede que el abuelo estuviera mermado por la enfermedad, pero de tonto no tenia un pelo, y eso le hizo tomar una decision.

Para sorpresa de todos, mi abuelo anuncio que no pensaba dejarle a sus hijas mas que lo que la ley le obligara. Eso suponia que la herencia tendria que repartirse entre sus tres nietas, aunque dejo claro que aun no habia decidido que cantidad recibiria cada una. Eso provoco que la tension entre mis primas y yo aumentara aun mas.

- Ahora es responsabilidad tuya, Denisse.

- Dejame en paz, mama.

- ¿Quieres que tus primas se lo lleven todo?

- No, esas lagartas no se merecen nada.

- Por eso mismo, la herencia tiene que ser toda tuya.

- No puedo acercarme a el porque no lo dejan ni a sol ni a sombra.

- Pues ahora que lo dices, podrias ser carinosa y ponerle la cremita en la playa.

- Pero si nunca va, siempre se queda en casa.

- Es verdad, ya no se mueve para nada.

- Si hubiera algo que pudiera hacer lo haria.

- Lo que sea, hija, aunque le tengas que sujetar la chorra mientras mea.

- !Mama!

- Perdona, carino, pero no puedo soportar que esas se lo lleven todo.

Por primera vez en muchisimo tiempo estaba de acuerdo con mi madre, pero no queria tener que rebajarme hasta ese punto, y mucho menos por dinero. Era evidente que tenia que encontrar una solucion, porque mis primas llevaban ya mucha ventaja y tenia pinta de que se lo iban a llevar todo. No podria soportar que tuvieran todavia mas motivos para restregarme su superioridad.

A partir de ese momento comence a observarlas, sobre todo cuando estaban con el abuelo, para ver en que podia imitarlas y tratar incluso de superarlas. Las tenia todo el dia vigiladas e intentaba que no se quedaran a solas. A veces parecia que lo estaba logrando, hasta que me di cuenta de que habia un momento en el que las perdia de vista.

No parecia fruto de la casualidad que desde que el abuelo anuncio que iba a repartir la herencia entre sus nietas, mis primas llegaran siempre mas tarde a la playa. Por un motivo que no lograba entender, todavia seguiamos bajando todos en familia, menos ellas, que aparecian un buen rato despues. No hacia falta que fuese una desconfiada para saber lo que estaba pasando ahi.

Tenia que trazar un plan que me permitiera saber que estaban haciendo exactamente. No me convenia un enfrentamiento directo con ellas, asi que tenia que hacerlo con mucho cuidado. La manana siguiente, baje a la playa con mis padres y mi tia como si todo fuese normal, pero al llegar dije que me habia olvidado la proteccion solar y volvi corriendo a casa.

Lo primero que me sorprendio al llegar fue escuchar musica. El abuelo nunca habia estado interesado, y menos por la de ese tipo, asi que me dejo descolocada. Enseguida me di cuenta de que provenia de la habitacion de el, y me acerque con sigilo. Me asome por la puerta, sin saber muy bien que me iba a encontrar. Lo que si tenia claro era que jamas me hubiese imaginado lo que vi.

El abuelo estaba sentado en su sillon y mis primas, cada una a un lado, bailaban en bikini. Puede que ese acto en si no fuese demasiado perturbador, el problema era que el no dejaba de manosearlas y ellas no dudaban en darle besos incluso en la boca. Volvi a la playa antes de que me detectaran, completamente espantada por lo que habia visto.

- Denisse, parece que has visto un fantasma.

- Ojala fuese eso lo que he visto.

- ¿De que estas hablando?

- Ya se como pretenden conseguir la herencia las primas.

- Cuentamelo.

- Bailan para el.

- ¿Solo eso?

- Lo hacen en bikini mientras lo besan y el las toquetea.

- ¿Estas segura?

- Si, mama, lo he visto con mis propios ojos.

- Me parece repugnante lo que te van a obligar a hacer.

- ¿Como dices?

- No puedes quedarte atras, hija, debes seducirlo tu tambien.

- Supongo que no lo estaras diciendo en serio.

- Unicamente tienes que bailar un poco y dejar que te toque.

- !Es mi abuelo!

- Hay muchisimo dinero en juego.

- Ni siquiera puedo competir con el cuerpo que tienen ellas.

- Dices que se dejaban tocar, ¿no?

- Si, eso es lo que vi.

- Pues ve un paso mas alla y tocalo tu a el.

No me podia creer que mi madre me estuviera proponiendo en serio que le hiciera eso a mi abuelo, a su propio padre. Entendia sus ansias de dinero, especialmente si la alternativa era que mis primas se quedaran con todo, pero era dificil de asimilar que me estuviera ofreciendo de esa manera. No habia mantenido nunca relaciones con nadie, asi que me horrorizaba que el primero pudiera ser el y encima por interes.

Me negue a hacerlo, pero los dias fueron pasando y mis primas seguian repitiendo su misma estrategia. Sabian que se habian ganado ya al abuelo, por eso se dedicaban a presumir aun mas de lo habitual. No soportaba verlas asi de contentas, tan seguras de que ellas se lo iban a llevar todo y yo nada. Aun asi, me mantuve firme en mi idea de no rebajarme.

Una semana despues de haber presenciado aquello, tras bajar a la playa, me di cuenta de que ese dia me habia olvidado de verdad la proteccion solar. No queria volver a la casa y encontrarme con lo mismo, pero no me iba a quedar mas remedio. Entre sigilosamente, tratando una vez mas de no ser descubierta. Entonces me di cuenta de que no sonaba la musica.

Temiendo encontrarme algo todavia peor, me acerque al cuarto del abuelo, pero ese dia estaba solo. Mis primas debian tener otros planes o ya habian conseguido que les prometiera la herencia y no tenian que seguir esforzandose. En cualquier caso, el se dio cuenta de que estaba tras la puerta y me pidio que entrara.

- Hola, abuelo.

- ¿Que haces aqui, Denisse?

- Me he dejado la crema para protegerme del sol. ¿Las primas no estan?

- No, por lo visto conocieron a unos chicos hace un par de dias.

- Parece que siempre les sonrie la suerte.

- Dime la verdad, ¿por que estas aqui?

- Ya te la he dicho.

- Se que me viste el otro dia con Catia y Gilma.

- Fue sin querer.

- Pero ahora te preguntas que tienes que hacer para superarlas, ¿verdad?

- No, yo no...

- Ven, acercate.

Obedeci al abuelo y me acerque hasta su sillon, entonces el me cogio de la mano y tiro de mi para que me sentara en sus rodillas. Comenzo a mecerme como si fuera una nina pequena, a acariciarme el pelo. Podian haber pasado por gestos totalmente inocentes, tipicas muestras de afecto a una nieta, de no haber sabido lo que solia hacer con mis primas.

Me quede quieta, esperando que eso fuese suficiente para que al menos me tuviera en cuenta a la hora de redactar el testamento. Lo unico que me incomodaba hasta ese momento era lo ligera de ropa que iba, ya que unicamente llevaba el bikini y un pareo alrededor de la cintura. El abuelo comenzo a contarme historias de su juventud, mientras se animaba a colocar una de sus manos sobre mi muslo derecho.

Quise restar la importancia, pero no se limito a dejar su mano ahi. En cuestion de segundos ya estaba apretando, como si quisiera palpar la tension de mi carne. Fue ascendiendo hasta acercarse peligrosamente a mi sexo, pero lo esquivo y siguio subiendo hasta meterme la mano por debajo de la parte de arriba del bikini y sujetarme uno de mis pechitos.

- Abuelo, ¿que estas haciendo?

- Me gusta palparles las tetitas a mis nietas.

- Las de Catia y Gilma no son precisamente pequenas.

- Por eso mismo, a mi siempre me han excitado las de tu tamano.

- Pero soy tu nieta, no puedes meterme mano.

- Si que puedo, porque lo que te voy a dar a cambio merece la pena.

- Nunca me ha interesado tu dinero.

- No seas tonta, Denisse, podras alejarte de los estupidos de tus padres.

- Dudo que sea capaz de hacerlo.

- Dejame sentir el calor de tu entrepierna y tus primas no veran ni un centimo.

- Abuelo...

- Tu solo dejate llevar.

Mientras seguia aferrado a mi teta derecha, sosteniendo el pezon entre la punta de sus dedos, la otra mano se deslizo por debajo del pareo y fue directa a rozar mi sexo. Di un respingo sobre sus rodillas, jamas nadie me habia tocado en esa zona con esas intenciones, ni siquiera yo misma. Al principio frotaba por encima del bikini, pero no tardo nada en apartarlo.

Yo misma notaba lo humeda que estaba, y pude confirmarlo por el ruido que hacian los dedos de mi abuelo al acariciar me la rajita. Era lo mas extrano que me habia pasado en la vida, pero no podia negar que si cerraba los ojos y me dejaba llevar como el me habia pedido, resultaba bastante excitante.

El abuelo comenzo a besarme el cuello mientras seguia sobandome los pechos y acariciandome con lascivia mi conito. Lo hacia con delicadeza, asegurandose de no entrar en mi y desgarrar mi himen. Me sorprendia como podia estar poniendome tan caliente con unos simples tocamientos, hasta que me lo susurro al oido.

- Esto que te estoy frotando es el clitoris. Te gusta, ¿verdad?

- Mucho.

- Apuesto a que es la primera vez que sientes placer.

- Si, ni siquiera yo misma me habia tocado.

- Pues te vas a llevar el dinero y tu primer orgasmo.

Siguio estimulandome el clitoris hasta que todos los musculos de mi cuerpo se tensaron, arquee la espalda y cerre las piernas dejando su mano atrapada entre mis muslos. Senti un placer descomunal, un calor que se iniciaba en mi sexo y se expandia por cada rincon de mi cuerpo. Los gemidos escapaban de mi boca descontrolados, expresando lo tremendamente a gusto que me habia quedado.

- ¿Que te ha parecido?

- No puedo ni hablar, abuelo.

- Yo tambien he disfrutado mucho.

- Entonces... ¿ahora todo es para mi?

- En principio si.

- ¿Que quiere decir eso?

- Denisse, yo te prefiero a ti, pero si tus primas me ofrecen algo mas va a ser dificil que pueda rechazarlo.

Continuara....
22 Jan 2024Mi madre y mi primo en Navidades Tradicionalmente, en mi familia nos hemos juntado siempre todos durante los dias mas emblematicos de las fiestas de Navidad. En estas Navidades, mis padres y tios decidieron que en Nochebuena vendrian todos a nuestra casa. Sin embargo, mi madre y mi primo pasaron unas navidades un tanto diferentes.

Tradicionalmente, en mi familia nos hemos juntado siempre todos durante los dias mas emblematicos de las fiestas de Navidad. En estas ultimas Navidades, mis padres y mis tios decidieron que en Nochebuena vendrian todos a nuestra casa. A titulo personal, la verdad es que siempre me han dado mucha pereza las celebraciones de este tipo: el hecho de juntarme con la familia, el tener que hablar de lo mismo todos los anos, etc. Lo unico que me gustaba de estas cosas es que venia mi primo, con el que tengo mucha confianza desde que eramos pequenos. Mi primo y yo somos los tipicos que, mas que primos, parecemos colegas de toda la vida. No nos cortamos en nada a la hora de hablar, no ocultamos ningun tema ni obviamos nada; todo lo que queramos solemos hablarlo sin tapujos.

Mi familia esta compuesta por cuatro miembros: en primer lugar, mi padre. Su nombre es Pedro, tiene 46 anos, y trabaja de camarero en un local de la ciudad. Mi madre, Ana, tiene 45 anos y es enfermera. Mi madre es la tipica mujer que se cuida, hace deporte, se mantiene en forma y aparenta menos edad de la que tiene. De hecho, es habitual que despierte el interes de los chicos cada vez que pasa por su lado en la calle o en el propio hospital. Para que os hagais una idea, es morena, tiene el pelo largo, liso, con ojos marrones, delgada, un buen culo y utiliza la talla 95 de pecho. Por otro lado, se encuentra mi hermano pequeno, Juan, y yo, Pablo, de 23 anos. Yo soy estudiante de oposiciones y trabajador en un taller de la ciudad, por lo que entre el trabajo y el estudio apenas tengo tiempo para mucho mas durante estos meses.

El 24 de Diciembre, dia de Nochebuena, llegaron mis tios y mi primo a mi casa a eso de las dos del mediodia. Mi primo, Sergio, tiene 21 anos, por lo que es un par de anos mas pequeno que yo. Sin embargo, su actitud suele destacar por encima de la mia, ya que es el tipico chulito, pasota, que ni estudia ni trabaja y que vive por y para el mismo. A pesar de ello, como digo, nos llevamos estupendamente y tenemos mucha confianza.

Al llegar y hacer los saludos oportunos, mi primo y yo fuimos directos a la cocina a por un par de cervezas mientras que mi padre y mi tio preparaban la barbacoa y mi madre y mi tia hablaban en el salon. Mi tia tiene la misma edad de mi madre, aunque de cuerpo no es tan top como ella. Estando en la cocina Sergio y yo nos pusimos unas cervezas y algo de picar.

- Va, Sergio, vamos a coger fuerzas que estos dias de mierda se pasan muy lentos -dije riendome-

- Ya te digo, bro, jajajajjaja. Siempre es lo mismo, no hay nada nuevo ningun ano (Sergio)

- Encima este ano se han empenado en estar todo el dia juntos... asi que necesitamos cerveza para soportarlo -me rio-

- Yo sabes lo que pienso de todo esto. Pero, fijate, que no me arrepiento de haber venido... -se rie Sergio mirandome mientras se apoya en la encimera con la cerveza en la mano-

- ¿No? ¿Y eso?

- Joder, Pablo, ya sabes como soy y lo sincero que trato de ser siempre... ver a tu madre con ese vestidazo marcando culo siempre es un buen motivo para estar aqui jajajajajja

- JAJAJAJAJA cabronazo! que es mi madre, y tu tia, te lo recuerdo

- Si si, lo se, pero tu madre, y mi tia, tiene un polvazo tremendo... que envidia me da tu padre, joder, vaya puto culo

Y si, la verdad es que tenia razon. Ese dia mi madre iba estupenda con el vestido nuevo que se habia comprado: vestido gris, escotado, con la espalda abierta y cuya altura estaba a mitad del muslo.

- A ver si te vas a poner cachondo ahora, cabron jajajaj

- Jajajajajaja tranquilo, ya me pondre cuando la tenga a cuatro patas en la cama en un descuido que tengais. -dijo Sergio riendose-

- Venga ya! jajajaja ¿te piensas que va a caer asi de facil? no la conoces eh

- ¿Que no? ¿Que te apuestas? Te digo yo que hoy tu madre y yo acabamos een la cama... ostia si acabamos..

No pude evitar reirme ante ese comentario. Lo veia como algo ilogico, improbable, totalmente fuera de lugar. Cuando cogimos las bebidas decidimos salir para el salon, con los demas, y nos sentamos en el sofa. A menudo veiamos a mi madre y mi tia andar de un lado para otro preparando las cosas para comer. Sin embargo, las miradas de mi primo iban para mi madre, y las mias, inconscientemente tambien. No habia color entre ellas. Las comparaciones son odiosas, dicen.

Mi madre se puso a poner la mesa y, en ese mismo momento, mi primo me dio un codazo. Lo mire:

- Puf mirala tio... ¿tu te crees que esa no tiene ganas de echar un buen polvo? -susurrando-

- Tio, que es mi madre; se que no te cortas, pero joder... -proteste susurrando de nuevo-

- Jajajajaja precisamente porque es tu madre, tio. Tienes quee saber que la tia que te trajo al mundo me pone la polla como una piedra... -susurrando-

- Pues hazte una paja, bro, y asi te relajas jajajjaa -susurrando-

- Nah, prefiero que me la haga ella, o follarmela directamente... -susurrando-

Justo en ese momento, Sergio se levanto del sofa con su cerveza en la mano y se pego a ella a su lado.

- ¿Te puedo ayudar? Venga, que asi acabamos antes... -dijo sonriendo-

- Ayy, claro Sergio! muchisimas gracias -dijo mi madre sonriendo y mirandolo-

Sergio me miro sonriente, guinandome un ojo. Entendi que hacia eso para acercarse a ella, o eso me parecio. Mientras estaba con ella en la mesa, en una de esas, se coloco detras suyo mirandome e hizo un gesto con sus manos simulando que le daba un azote. Cuando ella se inclino para poner los cubiertos, el desde atras aprovecho que solo podia verlo yo e hizo el tipico gesto de follada mirandola...

Tras poner la mesa, se fue con ella a la cocina a acabar de arreglar las cosas. Yo no sabia donde meterme en ese momento. Conozco bien a mi primo, y se que cuando se le mete algo en la cabeza es dificil sacarselo. Estaba convencido de que iba a intentar ligarse a mi madre. Iba a intentar follarsela, lo tenia claro.

A la hora de comer todos nos sentamos en la mesa del centro del salon y comimos como si nada. Todo era normal. A mitad de la comida, mi madre se levanto a buscar mas vino en la cocina, a lo que Sergio aprovecho para levantarse e ir con ella a "coger cervezas". Sabia que eso no era mas que una excusa para poder estar a solas con ella. Entre otras cosas, porque en la vida Sergio se habia levantado de la mesa para ir a por algo a la cocina. Nunca.

A los pocos minutos vinieron, cada uno con sus bebidas, y seguimos comiendo hasta acabar.

Llego la tarde, y con ella el tardeo tipico de Nochebuena. Decidimos tomarnos algunas copas en la casa y despues salir por ahi antes de cenar. Todos nos echamos unos cubatas y nos los bebimos por el salon, tomandolos junto con los dulces tipicos de navidad. Durante ese momento, vi como mi primo se sento al lado de mi madre en el sofa y empezo a hablar con ella. Notaba risas, miradas, hablaban los dos animados. Estuvieron asi un buen rato, hasta que se levantaron con la copa vacia y salieron del salon anunciando que iban a recargarlo.

A los diez minutos aun no habian llegado al salon, cosa que me extrano. Decidi ir a la cocina con la excusa de echarme otro. Cuando fui por el pasillo, escuche alguna risa. Intente andar haciendo el minimo ruido posible, y me asome a la puerta de la cocina con cuidado. Efectivamente, las risas venian de alli. Mi madre estaba apoyada en la encimera, con su copa en la mano, y mi primo justo frente a ella con su copa en su mano. Estaban de buen rollo, riendose, susurrandose, etc.

Sinceramente, nunca habia visto a mi madre hablar con mi primo de esa manera. Siempre ha sido una relacion cordial, pero nunca con ese tonteo de risitas, susurros... Eso hizo que, por un lado, me jodiera ver como mi primo se iba saliendo con la suya de intentar algo con ella, y por otro lado, me daba una sensacion de morbo dificil de explicar.

En fin, no quise que se dieran cuenta de que estaba ahi, ya que queria ver lo que ocurria. Mire sin que me vieran y puse la maxima atencion posible. Aunque hablaban flojo, pude captar algunos de sus comentarios.

- Madre mia, Sergio, me lo has cargado bien esto eh -dijo mi madre riendose mientras con un dedo daba vueltas a los hielos de la copa-

- Anda ya, exagerada... a mi es que me gusta todo bien fuerte.. -dijo riendose, provocando que mi madre tambien se riera con dicho comentario-

- ¿Todo? -pregunto ella-

- Todo, todo... pero vamos, que dudo que te sorprenda, a cualquiera le gusta asi todo...

- Bueno, a cualquiera no, no a todo el mundo le gusta "todo bien fuerte" -dijo riendose ella-

- ¿A ti te gusta?

Mi madre, en ese momento, empezo a reirse y a beber de su copa mirandolo fijamente.

- Pues si, a mi me encanta... -dijo ella-

- ¿Y a tu marido le gusta?

- No, no le gusta jajajajaja vamos, que yo sepa no -miro mi madre a mi primo bebiendo-

- Pues que pena, porque teniendo una mujer asi... pff

- Anda callate... y vamos para afuera, que estaran pensando que donde estamos -se reia mi madre-

Justo cuando mi madre se quitaba del lugar en el que estaba, yo hice el amago de moverme hacia atras para irme sin que me viera. Sin embargo, vi como mi primo la agarraba de la mano pegandola a el.

- ¿Seguro que quieres irte? -dijo sonriendo Sergio-

- ¿Que haces? que podria ser tu madre eh...

- Puf te digo yo que si fueras mi madre... mi padre pasaria muchas noches solo -dijo riendose mi primo-

- !Pero bueno! Jajajajjajajaja

- Jajajaja ¿sabes? podrias venirte conmigo de tardeo... aunque tenga que inventarme una excusa con Pablo... pero ir contigo de fiesta debe ser una locura -susurro Sergio-

- ¿Si, no? Anda, no digas tonterias...

- No es ninguna tonteria. Puedes poner una excusa e irte a algun sitio, y yo puedo hacer lo mismo. La diferencia es que nos vamos juntos a algun local a beber algunas copas sin tener a nadie conocido cerca, asi hablamos de todo... -dijo mirandola-

Mi madre dudaba, se le notaba mucho. Su relacion con mi padre cada vez era mas monotona y aburrida. Apenas se les escuchaba ya y se pasaban mucho rato discutiendo cada dos por tres. Quizas, no lo se, noto en Sergio algo diferente y no sabia como reaccionar.

- Vaa... animate.. prometo cuidarte -susurro riendo Sergio-

- ¿Ah si? ¿Me vas a cuidar? Que caballero...

- Por supuesto... si lo estas deseando... un par de copas y volvemos.. va.. -insistia Sergio acercando su cara hacia la de ella, quedandose mi madre con la espalda pegada a la pared-

Mi madre lo miraba pero no se apartaba. Sergio se junto mas y acabaron los dos a centimetros. El la agarraba de la cintura y ella puso su mano en el pecho de mi primo. No podia creerme lo que estaba viendo...

En ese momento se dijeron algo que no pude captar, pero los dos empezaron a reirse flojito, mirandose, y pum... mi primo se acerco mas a ella y le planto un beso en los labios, el cual mi madre siguio al momento. Los dos se fundieron en un beso lento, pero con gran intensidad. Mi primo bajo la mano al culo de mi madre, acariciandolo, mientras que ella ponia su brazo sobre los hombros de mi primo. Desde la puerta inclinado, veia como los dos se liaban despacio, pero jugando con las lenguas desde el primer momento.

Mi primo trataba de subirle el vestido mientras le sobaba el culo, y justo en ese momento mi tia llamo a mi madre diciendole que le llevara otra copa. Los dos pararon al momento y se separaron, quizas siendo conscientes de la situacion.

- Vamos, que pueden venir... joder, esto no esta nada bien, Sergio -dijo ella mirandolo y apartandose-

- Pf ya lo se, no esta bien, esta muuuy bien... vaya besos das... -dijo susurrando mientras se reia, haciendo que mi madre se riera tambien un poco-

- Va, imaginate esto por ahi, solos, sin que nadie nos interrumpa y sin prisas... piensatelo -le dijo Sergio mirandola y le dio un azote en el culo junto con un pequeno beso.

Yo me escondi como pude en la habitacion de al lado cuando vi que iban a salir de la cocina.

Al poco, sali al salon haciendo como si acabara de terminar de hablar por el movil. No sabia que hacer ni como reaccionar. Si se lo contaba a mi primo, quizas no seria tan morboso como verlo a escondidas. Pero, por otro lado, si no le decia nada, corria el riesgo de que el no me lo contara ni me diera detalles.

Me sente al lado de mi primo, que estaba con su movil. Al poco, mi madre nos miro a todos.

- Perdonad, pero tengo que ir al hospital que anoche me deje alli mi cartera y me acabo de dar cuenta. Voy en un momento antes de que sea mas tarde y enseguida vuelvo.

Me quede en shock. ¿Seria verdad que se iban a ir juntos a tomar algo? Mi primo justo en ese momento dijo:

- Si quieres que te lleve en coche, asi te ahorras ir andando... y asi ellos no tienen que conducir ahora. Al menos, yo estoy vestido y en un momento te puedo acercar.

- Vale, gracias Sergio -dijo mi madre sonriendo-

- Genial, pues vamonos... -se levanto Sergio cogiendo sus cosas-

Los dos salieron de la casa y yo no pude evitar mirar por la mirilla de la puerta. Los vi esperar el ascensor. Cuando entraron al ascensor, vi como se sonreian, el le agarraba del culo y se acercaban besandose, con muchas mas ganas que en la cocina, al mismo tiempo que las puertas se cerraban...

Continuara...

Cualquier duda, pregunta o aportacion sera bien recibida por comentarios y por el correo electronico que teneis en mi perfil.

!Un saludo!
16 Feb 2024Jugando con mi amiga Astrid Cuando Astrid entro a la recamara a pedirme perdon, y me toco mi pucha la cual tenia mojadisima pensando en la verga del taxista, la brisa de la lluvia en mis piernas, la vibracion de la moto y por ultimo la cercania con su papa, el como me hablo y como me toco, pues estaba super excitada.

Despues de que me beso, me seguia pidiendo perdon y me decia que haria lo que fuera por que la perdonara, la verdad es que nunca habia estado con alguna mujer, pero era tal mi excitacion, que solo opte por tomarla de la cabeza, y bajarla hacia mi pucha, separe mis piernas y las levante, y ella sin ningun problema se hundio en mi pucha, hizo a un lado mi calzon y me daba unos lenguetazos tan ricos, me chupaba, me succionaba, me daba pequenos mordiscos en mis labios de mi pucha, en fin me estaba dando el mejor sexo oral que me habian dado!!!, me vine muchisimo, mojando su cara, y no me importo nada, la levante y la empece a besar, a chuparla la cara y a saborear mis jugos!!!!

Se levanto y salio de la recamara, yo me quede acostada de lado, dejando mi culo hacia la puerta, me estaba quedando dormida, cuando empiezo a sentir mojado mi culo, cuando volteo, Astrid me estaba untado vaselina, y me dijo que la dejara disfrutarme. Cuando levanto la mirada, estaban los consoladores en mi cama y la jale a que se acostara a mi lado, la volvi a besar pero ahora yo fui quien le empece a realizar un sexo oral que disfruto mucho y yo tambien, despues de unos minutos me levanto, y me dijo que si me dejaba meterme un consolado por mi culo?? Le dije que si!!!!

Me coloco en 4, me q termino de quitar mi calzon y con la punta de un consolador me empezo a untar la vaselina, metio el consolador mas pequeno, y le dije que me metiera el mas grande, ya que mi culo lo tenia ya trabajado!!! (Esto por que desde que empece mi vida sexual, me daba miedo quedar embarazada, asi que me penetraban por el culo)

Me coloco un consolador y me lo dejo adentro, mientras yo le untaba a ella vaselina en el culo igual, ella me dijo que seria la primera vez que se meteria algo por el culo, asi que empece a meterle el mas pequeno, le dolia un poco, pero le gusto, despues de tenerla un rato con el consolador chico, le puse otro mas grande, se lo deje un rato, mientras le lamina su pucha, cuando me dijo que queria que nos metieramos el consolador doble, asi que fue por el a su cuarto, sin sacarse el consolador que le habia metido.

Cuando regreso, limpiamos los consoladores para poder ocuparlos en nuestras puchas, le volvi a untar vaselina, la coloque en 4 y le meti un lado del consolador, ya que lo aguanto, empece a meter celo y sacarselo lento para que se acostumbrara, le dije que lo sostuviera, me coloque atras de ella y yo empece a metermelo por mi culo, ya que lo teniamos las dos dentro, nos empezamos a mover, de tal forma que nuestras nalgas ya nos chocaban, con mis piernas, le abri las suyas, y viendo por debajo, le meti otro consolador en su pucha, y otro a mi!!!

Estabamos las dos bien ensartadas, tanto por la pucha como por el culo!!! La verdad es que no supe cuanto tiempo estuvimos asi, pero yo volvi a venirme, sintiendo mis jugos escurriendo por mis piernas, y ella cuando se vino, me bano a mi!!!, se vino de tal manera que me mojo mis piernas y mi cama!!, parecia que se habia orinado!!!

Poco a poco me fui sacando el consolador del culo, me quite el de la pucha, y le quite los consoladores a ella, la recoste y la bese de nuevo, y asi nos quedamos dormidas!!!

Al dia siguiente como era de esperarse llegaron sus papas, pero para esto, ya eran casi las 12 del dia!!!, nos despertamos de un brinco, ya que estabamos desnudas, les grito a sus papas que ya iriamos, que nos arreglariamos y saldriamos, la ventaja es que era fin de semana, ese fin de semana no trabaje y Astrid habia pedido permiso de faltar, y ademas como la senora Tere ya habia limpiado la casa, pues teniamos todo el dia libre.

Nos banamos y nos preparamos para ir a comer todos, yo la verdad me quede con la espinita de como se habia portado la senora Tere conmigo, asi que opte por vestirme con un short de mezclilla y una playera de tirantes strech, y Astrid con un vestido corto, a media pierna, con poco vuelo.

Cuando salgo de la reclama hacia la cocina, Don Armando no me quitaba la vista de encima y la verdad pues yo trataba de provocarlo, asi que fui a saludar a sus hermanos de Astrid que estaban sentados en la sala junto con su papa, su hermano se levanto y me saludo, pero su hermana no, asi que me agache a saludarla, pero me agache de una forma que deje que mi culo se levantara un poco!! y de reojo vi que Don Armando se perdia en mi culo, me levante y fui a saludarlo a el tambien, pero tampoco le di oportunidad de que se levantara, asi que me agache para saludarlo, jalandome un poco mi playera hacia abajo, para que se me vieran mas mis bubis, y resulto como queria, por que Don Armando nunca me vio la cara, solo veia mis senos con cara de lujuria!!! hasta que le levante la cara con la mano y le dije, aca estoy Don Armando, me vio y se sonrojo muchisimo, no sabia que decirme!!, se levanto rapidisimo y me abrazo como para seguir el saludo, al momento en que me abrazo, en el oido le dije que si le gustaba lo que vio??, se aparto y con una sonrisa me dijo que mucho, pero ya apartandose de mi, como que no penso que le fuera a decir eso!!!

Fui a la cocina a saludar a Dona Tere, y se me quedo viendo de pies a cabeza, cuando ya me queria decir algo, la abrace para saludarla y le dije…

-Senora Tere, quiero que respete mi forma de ser, asi soy yo, y nada ni nadie me va a cambiar, asi que mejor llevamos la fiesta en paz, le parece bien???, me agarro de mi cara, me abrazo y me dijo, cuidate chamaca por favor!!!

Ya que salio Astrid, nos fuimos a comer a un famoso restaurante sobre la costera. Cuando nos pasaron a la mesa, Don Armando se sento junto a mi, (Que raro??), y mientras comiamos y platicabamos, el con el pretexto de acomodarse la servilleta en sus piernas, me acariciaba la mia, y yo con cualquier pretexto de alcanzar algo de la mesa, me apoyaba en su pierna, la verdad es que tanto Don Armando como yo ya andabamos tocando nos mucho y ya sin importar si nos veian.

Estuvimos mas de 3 horas comiendo, riendo, platicando, y en ese tiempo, Don Armando no me dejaba de acariciar la pierna, de hecho en un momento, le tome su mano tratando de disimular lo mas posible y se la lleve a mi pucha, pero como el short me quedaba muy pegado, solo me pudo tocar por encima del short sintiendo como se partian mis labios, despues en otra oportunidad, me tomo mi mano y me la puso encima de su pantalon para sentirle su vergota, la verdad es que la tenia grandisima, y muy gorda, y yo ya no quite la mano de ahi, se lo acariciaba cada vez que podia.

La senora Tere le pidio a Astrid que la acompanara al bano, mientras nos traian los postres, su hermano de Astrid fue por algo a la camioneta y su hermana estaba metida en un videojuego el cual yo estaba viendo como lo jugaba, cuando Don Armando no tardo nada en sacarse la verga, me toma la mano y me la pone en su verga, cuando la senti, volteo a verlo y el como si nada, solo veia para ver si no venian ya a la mesa, se sentia que le reventaba, la tenia super gorda, sus venas bien marcadas, me empece a poner nerviosa, pero no la soltaba, empece a mover mi mano de arriba a abajo, chaqueteandosela con movimientos lentos y apretandosela, pero en eso me quito la mano, por que ya venian del bano, y yo como seguia viendo el juego de su hermana, pues ni sospecha.

Regresando a la casa trataba de buscarle la mirada a Don Armando, pero el estaba manejando, asi que ni me Voltea a a ver, yo estaba super prendida, llegando a la casa, bajamos de la camioneta y nos quedamos platicando afuera de la casa por un ratito, Dona Tere se despidio de nosotras, diciendo que se sentia cansada, asi que todos se despidieron, cuando se me acerca Don Armando a despedirse, y me dice que si queria estar con el, que lo viera en el hotel donde se estaban hospedando, que habia rentado otra habitacion solo para nosotros y me dio la llave, me dijo que ahi lo esperara!!

Yo si tenia ganas de ver como era en la cama, asi que le dije a Astrid que tenia que salir a ver a un amigo de la escuela, que no tardaria.

Cuando llegue al hotel, me dio una nota la recepcionista, y me encamine rapido al cuarto. Cuando entre, lei la carta, me escribio don Armando que le encantaria verme vestida de colegiala, y que revisara el closet del cuarto, cuando voy a abrirlo habia una caja de regalo y tenia todo, desde el uniforme, zapatos de tacon, y la lenceria, y yo no se como supo mi numero de zapato, pero a todo le atino!!

Espero y les haya gustado este relato, en el siguiente les contare como me fue con Don Armando!!!!!, besos a todos!!!!